lunes, 27 de junio de 2011

La improvisación sobre la planificación

Da gusto tomarse un día de vacaciones para poder hacer todas esas cosas que el día a día te impiden hacer porque estamos demasiado ocupados o no encontramos el momento adecuado.

Ese era mi día de hoy. Tras un puente de cuatro días y teniendo en cuenta que iba a poder dormir poco durante el puente decidí tomarme el lunes como día libre (además de que me caducaba como día de vacaciones del año anterior). Y hoy tenía que aprovechar para hacer unas cuantas cosas. Además hoy estaba sola en casa y eso significaba que era yo la que marcaba 100% mis actividades.

Me he levantado a una hora prudencial, ni demasiado temprano para poder dormir un poco más de lo habitual, ni demasiado tarde para "desperdiciar" la mañana.

Tenía pensado irme temprano a dar una vuelta por mi antiguo barrio, para recorrer alguna de esas tiendas que echo de menos en mi actual residencia (en una urbanización de esas que para comprar el pan tienes que coger el coche). Pero después de desayunar me he dado cuenta que por la mañana en casa hace menos calor que por la tarde, así que he pospuesto mi salida matina a la tarde y he empezado a hacer algunas tareas domésticas de esas que con el calor da más pereza.

A primera hora de la tarde el calor ya era bastante agobiante y he decidido que justo después de comer no era buena idea salir, así que me he sentado encima de la cama a leer un rato. Leyendo, leyendo he acabado recostada y por tanto he terminado durmiéndome, obvio teniendo en cuenta los horarios de sueño del puente de cuatro días que acabamos de terminar.

Después de la siesta quería ponerme a enmarcar un cuadro que estoy terminando para mi madre, pero cuando ya lo tenía todo preparado y estaba a punto de grapar la tela al bastidor me he dado cuenta que no tendría grapas suficientes, así que he preferido dejarlo preparado pero no empezar a grapar. En su lugar me he puesto a escribir este post que no tenía previsto hacer.

Total que en todo el día  no he hecho nada de lo que tenía previsto, aunque he aprovechado para dormir un poco más de lo habitual y para comer más sano de lo que estoy acostumbrada al poder hacerlo en caso.

No hay como improvisar sobre los planes que ya tienes hechos y nada mejor que hacerlo un día de vacaciones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario